por Mercedes Páez
Como mexicanos estamos viviendo un momento de transición que nos hace un llamado de responsabilidad, flexibilidad y conciencia.
Bajo la perspectiva del coaching, el mundo se presenta como una representación de un modelo interno. De esta manera, la autoconciencia y el diseño de respuestas se encuentran directamente relacionadas con los resultados que se van a evidenciar hacia el exterior.
Preguntas como “¿quién quiero ser en esta circunstancia?”, “¿cuáles son las oportunidades y las posibilidades frente a este reto?” y “¿cómo voy a ser una contribución en este momento?” se ponen en primer plano.
Si piensas que alguien o algún factor externo van a solucionar o arruinarte la vida, vas a quedar en un lugar dependiente y sin poder. Diseñar, planear y observar cómo vas a contribuir con lo que se te presenta con tus propios dones, no sólo te saca del papel de víctima pasiva de las circunstancias, también te aleja de una conversación masiva carente de posibilidades.
En este sentido, y tomando en cuenta el contexto actual, no existe ningún líder o gurú que pueda salvarte, si primero no estás dispuesto a responsabilizarte de tu propio poder y de la forma en la que tú, convirtiéndote en lo que pides a los demás, te transformas en una propuesta de valor y es lo único que verdaderamente está en tu control.
Cada momento, cada experiencia, todo lo que ves, es una percepción personal, una interpretación que nace de tu propio mundo interno. Si con tus propios filtros vas a observar y si siempre vas a interpretar todo, asegúrate de que esa interpretación te empodere y te llene de posibilidades.
Vas a salir a evidenciar todo aquello con lo que estás filtrando tu realidad; inconscientemente vas a buscar cómo hacer que pase lo que para ti es una posibilidad. Las interpretraciones de la realidad te van a producir emociones que te van a empujar hacia decisiones que van a crear muchos resultados, que en conjunto serán tu vida.
El poder siempre ha sido tuyo y es tu elección, y sobre todo tu responsabilidad, comprometerte en el proceso, el pensamiento pasivo de que alguien puede salvarte o hundirte no le hace ningún bien a la realidad nacional; reconoce tu poder y toma tu papel en el proceso que hoy vive México, conviértete en lo que pides, esa es la mas profunda elección que puedes hacer hoy por tu país.